Seguramente, muchos saben que me quejo a menudo de que no me gusta la forma en la que escribo.
Desde pequeña he amado los libros con tanta devoción que a veces llega a asustarme, pero también siempre he amado escribir, cuando menos, a partir de que supe que si unías las palabras correctas podrías tener combinaciones infinitas de historias.
Pero eso, no me gusta mi manera de narrar, a veces hay tantas imágenes mentales que me es imposible darles secuencia y coherencia, y sobre todo, describirlas tal y como me las imagino. O puedo describirlas, pero al continuar no hallo la manera de darle un hilo a las ideas. Cosa bastante triste, cuando leo a personas -no necesariamente autores que han publicado best sellers- que tienen una capacidad impresionante para escribir.
Decidí que entonces, lo más apropiado sería practicar y practicar, hasta que algo bueno salga. Pero mientras, en esa incapacidad de traducir las imágenes que hay en mi cabeza a un texto que las describa perfectamente, está la imagen o la escena, tal y como la imagino -y a veces acompañada de música, otra dificultad que tienen los textos- y me doy cuenta de que puedo plasmar la imagen y la idea como tal, en bruto, en una foto, quizá en un dibujo -aunque me tome días, por que sí, puedo dibujar de una forma más o menos aceptable, pero soy terriblemente lenta para ello- o incluso en una secuencia de imágenes.
Entonces siento que realmente, no erré con mi carrera ♥
13 diciembre 2010
Publicado por Roxanne Spooky en 16:38
Etiquetas: Basura Literaria, Etcetera, idas de la mente
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